Los medicamentos antipsicóticos pueden ayudar a tratar los trastornos psiquiátricos.
Los antipsicóticos se usan para aliviar los síntomas de psicosis tales como delirios, alucinaciones, paranoia o pensamientos confusos. Se usan para el tratamiento de la esquizofrenia, la depresión y la ansiedad severas y son útiles para estabilizar los episodios de manía en las personas con trastorno bipolar.
Los antipsicóticos también pueden presentar muchos efectos secundarios y aumentar las probabilidades de desarrollar colesterol “malo” y diabetes.
Otros efectos secundarios de los antipsicóticos pueden incluir:
- Boca seca
 - Visión borrosa
 - Mareo
 - Aumento de peso
 - Convulsiones (rara vez)
 - Diabetes
 - Agitación
 - Estreñimiento
 - Somnolencia, poca energía
 - Rigidez muscular
 - Efectos en los movimientos (temblores, rigidez muscular y tics)
 - Discinesia tardía (TD), una afección que puede causar movimientos involuntarios repetitivos
 - Síndrome neuroléptico maligno, una complicación rara pero grave (fiebre, rigidez muscular y delirio)
 
Modos de reducir los posibles efectos secundarios:
- Hacer ejercicio regularmente
 - Seguir una dieta con bajo contenido de grasa, de azúcar y con alto contenido de fibra
 - Mantener la hidratación
 - Cepillarse los dientes con regularidad
 - Levantarse lentamente desde la posición de sentado o recostado
 
Los análisis de laboratorio periódicos son importantes para mantenerse saludable.
Los proveedores controlarán el peso, los niveles de azúcar y colesterol de la persona con regularidad. Si es necesario, el proveedor puede ajustar la dosis, recetar otros medicamentos para ayudar a controlar los efectos secundarios o cambiar le medicamento.